Google Glass irrumpió en nuestras vidas
tecnológicas de forma impactante, no pensábamos que un producto de esas
características iba a estar tan cerca de ser real, tan pronto. Igualmente
debemos reconocer que en los últimos meses la intensidad de noticias, y de
alguna forma el interés, se han ido diluyendo.
Hoy vuelve a la carga con una noticia bastante
interesante, ya que Google gana un aliado en el desarrollo de próximas
evoluciones de sus gafas. No es una asociación cualquiera, hablamos de un
gigante como Intel y sus ganas de estar dentro de los dispositivos móviles.
Por ahora la información no es oficial, nos la
acerca la gente de Wall Street Journal, y tiene toda la pinta de que es cierta.
La tecnología que había dentro de Google Glass no era precisamente un portento
en potencia o novedad, y en su parte principal, estaba firmada por Texas
Instruments.
Intel
no puede llegar tarde, como en telefonía
Para próximas generaciones de las gafas podemos
esperar la mano de Intel, que anda como loca intentando estar dentro de la
aventura wearable, ya que la de los móviles no les ha salido del todo bien,
hasta ahora. Su primera propuesta seria la encontramos en el mercado de las
joyas, con MICA.
Mientras el mercado sigue considerando si Google
Glass es un producto serio para estar a la mano de cualquiera, y de paso se
intenta regular su uso, parece que la gente de Intel tiene muy claro que deben
estar ahí dentro.
No pueden fallar en el plan B de los wearables,
donde ARM ya está copando la mayoría de gadgets que van floreciendo.
Desde la perspectiva del hardware, no sabemos en
qué podría mejorar el hardware de Intel a las gafas. Entendemos que mayor
potencia de proceso, menor consumo - talón de Aquiles de Glass -, o mejor
tecnología de conectividad, serán bienvenidos.
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