El 19 de junio de 2012,
Julian Assange se refugiaba en la embajada de Ecuador en Reino Unido y
solicitaba asilo político. El gobierno ecuatoriano se lo garantizó el 16 de
agosto de ese mismo año. Hoy, un par de meses después de cumplir dos años en
dicha embajada, Assange ha concedido una rueda de prensa ante los medios con un
mensaje claro: "pronto" saldrá de allí.
El fundador del
polémico portal Wikileaks no ha especificado cómo será el fin de su cautiverio
o si realmente su afirmación es más un deseo que una realidad. Ricardo Patiño,
Ministro de Exteriores de Ecuador, también estuvo presente en la rueda de
prensa y se mostró bastante crítico con la situación, denunciando que Assange
lleva dos años recluido "en contra de su libertad" e instando a la
comunidad internacional a tomar partido.
Algunos medios, como
Sky News o Fox (propiedad del magnate Rupert Murdoch), habían asegurado que
Assange podría estar a punto de abandonar su cautiverio por motivos de salud.
El propio Assange negó esto, aunque no ofreció más detalles: "Dejaré
pronto la embajada... pero quizás no por los motivos que la prensa de Murdoch y
Sky News están diciendo ahora", aseguró en unas declaraciones de las que
se hace eco Reuters.
Hace un par de meses, y
con motivo del segundo aniversario de su encierro, Assange concedió varias
entrevistas en las que explicaba las condiciones en las que vivía el día a día.
Así sabemos, según comentaba él mismo, que vive en un cuarto de apenas 20
metros cuadrados y sin ventanas que hasta su llegada albergaba una oficina.
Ahora, reconvertido en habitación, el cuarto incluye una cama, un escritorio
con su ordenador de trabajo y una cinta andadora para que Assange pueda
ejercitarse. "Es un poco como vivir en una estación espacial", decía.
Wikileaks:
desde 2010 dando "guerra"
Aunque el encierro de
Assange en la Embajada de Ecuador se produjo hace un par de años, su principal
obra y la causa de todo el problema, Wikileaks, vio la luz originalmente en
2007. Sin embargo, todo cambió en abril de 2010 cuando Wikileaks publicó un
controvertido vídeo clasificado en el que se veía un ataque de un helicóptero a
un grupo de civiles en Iraq. Dos de ellos eran colaboradores de Reuters. El
ataque pasó entonces a ocupar todas las portadas en medio mundo y podéis leer
más sobre él en la recopilación de los hechos que hacen en Wikipedia.
Unos meses después,
varios periódicos internacionales publicaban casi 100.000 documentos sobre la
Guerra de Afganistán. En octubre de 2010 le llegaba el turno a la Guerra de
Irak con más de 390.000 documentos clasificados filtrados donde se reconocían
las torturas a presos y, finalmente, en noviembre de ese mismo año se
publicaban más de 250.000 "cables" diplomáticos en los que se podían
leer las comunicaciones entre embajadas y el propio Departamento de Estados de
Estados Unidos. Aquí podéis echar un vistazo a la información filtrada por
categorías.
Desde entonces, el
Gobierno de Estados Unidos ha estado luchando sin descanso para conseguir que
Wikileaks cese sus actividades. Si bien no han conseguido prohibir el acceso ni
terminar con la página, sí que han intentado "ahogarla" con los
medios a su alcance. Primero fue Amazon la que, por presiones políticas, dejaba
de alojar el sitio web. Luego fue Paypal la que canceló la cuenta de
donaciones. Otras grandes de las transacciones financieras, como MasterCard o
Visa, también han bloqueado las donaciones a través de sus pasarelas de pagos,
aunque parecen haber conseguido saltarse estas restricciones a través de
terceros.
Las
consecuencias personales de Wikileaks
Si Wikileaks se ha
visto con numerosas trabas en sus pocos años de existencia, os podéis imaginar
lo que ha ocurrido con los responsables de la web. Bradley Manning, el soldado
que filtró los documentos originalmente, fue condenado el año pasado a 35 años
de cárcel por violar el Acta de Espionaje. El Gobierno inicialmente pedía un
castigo de 60 años al considerar que no sólo había revelado información
confidencial, sino que había ayudado al enemigo con sus filtraciones.
Respecto a los
responsables del sitio web, y si bien posee varios colaboradores, Julian
Assange es su creador, portavoz y la cabeza visible del mismo. Poco después de
que se publicaran los primeros documentos y vídeos clasificados, Assange fue
acusado en Suecia de violación y de abusos sexuales. Él siempre defendió su
inocencia, asegurando que habían sido relaciones sexuales consentidas. Tras
escapar a Reino Unido, la policía le detuvo por petición de las autoridades
suecas aunque terminó quedando en libertad bajo fianza. En 2011, la justicia
británica autorizaba la extradición de Assange a Suecia.
Assange asegura que
todo este proceso legal es un plan para conseguir su extradición a Suecia y,
posteriormente, a Estados Unidos, donde podría ser juzgado por traición y
espionaje. Con la presión de la justicia en sus talones, el 19 de julio de 2012
solicitó asilo político a Ecuador, que como decimos le fue concedido en agosto
de 2012. Y la embajada ecuatoriana lleva desde entonces, aunque la reclusión no
le ha impedido seguir ejerciendo su trabajo. De hecho, Wikileaks se ha hecho
cargo de la defensa de Edward Snowden, otro hombre en problemas por filtrar
información confidencial de la NSA.
¿Y
ahora qué?
Durante el tiempo que
Assange ha pasado encerrado en la embajada de Ecuador, la justicia británica ha
modificado las leyes de extradiciones. A pesar de ello, no está muy claro cuál
va a ser el futuro de Julian Assange y cómo conseguirá evitar a la justicia una
vez deje su asilo político. Tampoco sabemos la fecha en la que dejará la
embajada ecuatoriana, sino tan sólo un ambiguo "pronto". No sabemos
cómo, pero continuará...